+54 11 4331 6323 secretaria@accioncatolica.org.ar

Un acontecimiento de gracia. Un compromiso hacia el presente y el futuro

El mes de abril ha sido para la Institución un mes intenso. La posibilidad de encontrarnos con las Acciones Católicas del mundo en el marco del II CONGRESO INTERNACIONAL SOBRE ACCIÓN CATÓLICA, en la ciudad de Roma,  era un objetivo que latía en el corazón desde los meses anteriores. Sumado al encuentro fraterno, la gracia de realizarlo en torno al Papa Francisco, en el Aula del Sínodo, redoblaba el entusiasmo.

Llegó el 27 de abril y los 85 argentinos que integramos la delegación pudimos ser parte de este momento histórico, y hacerlo en representación de los miles y miles de miembros de nuestra Institución que viven a fondo el desafío de vivir una “Acción Católica que es misión. Con todos y para todos”, como reflejó el lema del Congreso.

Se inició la jornada en el Altar de la Cátedra, Basílica de San Pedro, donde celebramos la Eucaristía presidida por el Cardenal Pietro Parolin, Secretario del Estado Vaticano. Le siguió luego el ingreso a la sala para la primera Sesión inaugural sobre “Con la brújula de la Evangellii Gaudium, la Acción Católica escuela de discípulos misioneros”, en la que disertaron Zénobé Niragira (Burundí); Mons. Eduardo García (Asistente Eclesiástico del FIAC, asesor general de ACA y obispo de San Justo; y Stella Morra, teologa de la   Pontificia Universidad Gregoriana.

El movimiento del personal de seguridad y ceremonial anticipó a los participantes, alrededor de 10.45, que el Papa estaba al llegar. Al bajar del ascenso fue saludado por un grupo de niños de los diferentes países representados, entre las que se encontraban María Luján y María Fernanda Del Castillo, hijas de nuestro vicepresidente 2ª de Consejo Nacional.

El Cardenal Kevin Farrel, prefecto del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, y Emilio Inzaurraga, coordinador del Secretariado del FIAC, junto a Mons. Eduardo fueron encargados del saludo inicial, que el Papa recibió con alegría y que dio ocasión para que valorar la “invasión argentina”.

 

Gestos

Las palabras del Santo Padre fueron precedidas por gestos concretos de las acciones que se llevan a cabo, a veces anónimamente, pero que nutren la vitalidad de una asociación de muchos años en la vida eclesial que se renueva al soplo del Espíritu para responder a los signos de los tiempos con pasión evangelizadora.

Así los niños le entregaron al Papa un libro con dibujos sobre los verbos que nos propone la Evangellii Gaudium: “iluminar, bendecir, vivificar, levantar, sanar, liberar”, realizado por aspirantes de todos los continentes, junto al compromiso de ser evangelizadores de sus pares. Una familia de Malta le presentó como regalo un mantel que adorna la mesa familiar, signo de la fe que se trasmite en la familia y se abre a la comunidad; y un joven de África Central le trajo el abrazo de su pueblo y el agradecimiento por su visita con el compromiso de seguir trabajando por la paz.

A ellos se sumaron una familia de Belén que acercó señaladores realizados por refugiadas de Irak, como símbolo de nuestro discernimiento diario a la luz de la Palabra para poder transformar la realidad desde la luz que brota del Evangelio. Dos momentos significativos fueron el gesto entregado por la AC de Lampedusa, que trajo un pequeño Evangelio encontrado en un barco de inmigrantes, que quedó señalado en el Salmo 55, y la frescura de los niños de Belén que quisieron “enseñar” al Santo Padre a realizar la Señal de la Cruz en árabe ante su inminente viaje a Egipto.

En cada gesto, se simbolizó, la vida de las comunidades de las Acciones Católicas del mundo entregadas a vivir la fe y a irradiarla encarnándola en la cotidianidad de la vida.

 

Carisma, vocación, misión

Los delegados de 50 países pudieron luego escuchar al Papa, que en tono afable, cercano, como Buen Pastor, nos fue hablando del carisma, de la vocación, de la misión de la AC en el mundo actual, alertándonos con el cariño de un padre sobre de las tentaciones a evitar en el camino de la misión. Ver: http://bit.ly/2qte5dS.

Luego de este inolvidable momento, siguió un sencillo almuerzo, ocasión propicia para el intercambio en los más diversos idiomas y no pocos gestos para poder transmitir un mismo sentir misionero.

La tarde fue el espacio para propuestas y testimonios, experienciales y concretos, de una Acción Católica “viva, fuerte y hermosa” en las coordenadas de nuestra carta magna, que es la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium.

Así profundizamos nuestro ser misión como laicos caminando juntos, en la cual participaron del panel, Matteo Trufelli -presidente ACI-, Cardenal Carlos Osorio Sierra (España); y Antonio Muñoz Varo -presidente de ACG de España. En orden a vivir como Evangelizadores con Espíritu nos ayudaron a la reflexión los testimonios de Oana Tuduce (Rumania), Lei Lei Win (Myanmar), Therese Ndour Diop (Senegal), el padre Marcelo de León (Uruguay), y Suor Rosaria Carpentieri (Italia).

La cuarta sesión “Con todos y para todos”, contó con la propuesta de  Rafael Corso -presidente ACA- y de diversos especialistas que pusieron el foco en miradas particulares sobre las urgencias que la realidad nos presenta:  Medio ambiente, Sandro Calvani; Pobreza, Michel Roy; Paz, monseñor Salvatore Niciteretse; Amoris Laetitia, Franco Miano y Giuseppina De Simone.
El Congresó cerró con una quinta sesión “En salida” a 15 lugares de la Ciudad de Roma, donde se compartieron experiencias de misión en distintas realidades.

Con el corazón llenó de agradecimiento, el viernes 28 se inició la Asamblea FIAC, que cerró el sábado 29 a la mañana,  iluminada por la riqueza del jueves compartido, y con la oración puesta en el acompañamiento al Santo Padre en su viaje a Egipto. Se trabajó por realidades continentales y por edades,  para proponer desafíos hacia el futuro. La parte estatutaria de toda Asamblea dio paso a la nueva integración del Secretariado del FIAC para los proximos cuatro años, que quedó conformado por Italia, España, Burundi, Senegal y Argentina.

La fiesta cerró el domingo 30 de abril, en una Plaza San Pedro llena de sol y alegría, donde nuestra hermana mayor, la Acción Católica Italiana, celebró sus 150 años de servicio en el corazón de la Iglesia y del mundo. Ver: http://bit.ly/2rMKs4W.

¡Si! Vimos un acontecimiento de gracia, una experiencia inolvidable,  un compromiso hacia el presente y el futuro, abiertos a la docilidad del Espíritu que siempre impulsa hacia adelante.

 

En primer persona

Rafael Corso – Presidente del Consejo Nacional

Viví el 2° Congreso Internacional de AC como una extraordinaria experiencia de fe y de fraternidad, un esfuerzo de síntesis de razón, fe y compromiso en el aquí y ahora. La presencia sencilla del Papa Francisco con su voz serena y su mensaje claro y contundente coronó el esfuerzo de  los varios centenares de miembros presentes, provenientes de más de 50 países de los cinco continentes; pero más que ello, rescató y promovió el sentido de entrega generosa de miles y miles de  miembros de las distintas Acciones Católicas, discípulos misioneros de Jesús en el mundo de hoy, que desde sus lugares y vocaciones de vida ejercen su Misión con Todos y para Todos, construyendo un mundo mejor, la Paz de Cristo y el Reino de Cristo en la historia, en cada corazón, en el servicio al hermano, en la comunidad y en la sociedad. A seguir trabajando con Esperanza!

 

CLAUDIA CARBAJAL – Vicepresidenta 1ª del Consejo Nacional

Cuando se preparan acontecimientos importantes uno tiene la sensación de que el tiempo nunca alcanza para llegar bien preparados… Sin embargo, en los acontecimientos de fe hay una clave que lo potencia todo y es el paso del Espíritu que soplando impulsa la historia. Este 2° Congreso sobre AC, más allá de lo planificado, ha sido un paso del Espíritu, impulsándonos a renovarnos para salir más y mejor “con todos y para todos”. En la cálida y cercana voz del Papa Francisco, que nos habló como padre, están los desafíos que tenemos que asumir con pasión y servicio. Caminamos, entonces, para que esta vocación se expanda no por proselitismo sino por atracción de un laicado maduro y corresponsable que desde la más tierna edad despierta conciencia de bautizado, anhelo de santidad, diocesaneidad, compromiso social y eclesial, popularidad, para anunciar la buena noticia.

 

IGNACION DEL CASTILLO – Vicepresidente 2° del Consejo Nacional

Todo el viaje a la ciudad de Roma fue una experiencia realmente increíble. Participar del Congreso Internacional de la Acción Católica, junto con otros dirigentes de tantos países del mundo fue algo que me ha enriquecido profundamente, no sólo como dirigente de la Institución, sino como laico y persona. Por supuesto, la presencia del Papa Francisco ha sido lo más movilizante. Las palabras que dirigió a toda la Acción Católica son fundantes de un nuevo crecimiento de nuestra querida Institución a nivel mundial. Ser parte de eso, fue realmente una gracia.

Haber podido compartir este encuentro con el Papa, junto con mi mujer y mis dos hijas, creo que fue un plus que debo agradecer a Dios especialmente, por lo importante del momento.

 

SILVIA MONSUÁREZ – Responsable de la Comisión Nacional de Adultos

El Congreso ha sido una hermosa experiencia, una oportunidad para aprender y crecer. Rostros, idiomas, costumbres muy diferentes pero que se hacen ‘uno” en la manifestación del amor a Cristo y a su Iglesia.

Un espacio para “primerear” y abrirse a otros sin prejuicios. Para “involucrarse” en realidades diversas y volcar la propia experiencia. Para “acompañar” procesos y entender un poco mejor en que parte del camino estamos. Para “fructificar” acrecentando la entrega a la que el Señor nos invita. Para “festejar” sintiendonos amados por Dios en el Don del hermano. Papa Francisco: claro, cercano, padre y pastor.

 

GRACIELA GONZÁLEZ – Miembro de la Comisión Nacional de Adultos.

Fue una experiencia personal muy especial. Escuchar al Papa Francisco, en el Aula Sinodal Pablo VI, en nuestro idioma, produjo una íntima comunicación con él. Sus palabras parecían dirigidas a nosotros, sobre todo cuando se refirió a la diocesainidad y creo que sus expresiones se dieron para una realidad de contexto actual que vive nuestra Acción Católica en  Argentina.

Luego, participar en la Plaza San Pedro de la audiencia de los miércoles y del cierre de la Asamblea de la ACA Italiana nos demostró la inmensidad del amor de Dios a través del Papa Francisco. Y el compartir con otras realidades de otros países hizo al encuentro muy interactivo, eficaz , informativo e integrador en conocimientos.

Agradezco a Dios por haber tenido esta hermosa oportunidad de vivir todo ello.