Enrique un hombre de estima y benevolencia
Enrique nos habla de Enrique
En la estima y benevolencia para con el prójimo.
Procuró “estimar a los otros o por lo menos tenerles «benevolencia», buena voluntad. ¿Pensamos en la posibilidad de que a veces «el otro», subordinado funcionalmente a uno, pueda ser sin embargo superior, más meritorio? Y sin embargo las Sagradas Escrituras nos lo indican en forma categórica (Filipenses. 2,3; Rom. 12,10)”.
Así en el trato con los empleados por ejemplo que los consideraba como ejecutivos y no meros ejecutores, y cuando necesitó sangre para transfusiones fueron a donar más de 260 trabajadores, y les agradeció feliz por la sangre que corría por sus venas.
Oración
Oh Dios, tu siervo Enrique nos dio un alegre ejemplo de vida cristiana a través de su quehacer cotidiano en la familia, el trabajo, la empresa y la sociedad. Ayúdame a seguir sus pasos con una profunda vida de unión contigo y de apostolado cristiano. Dígnate glorificarlo y concédeme por su intercesión el favor que te pido… Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
(Padrenuestro, Avemaría, Gloria).