20 de diciembre | El Papa y la Acción Católica
Queridos Adultos:
Continuando con la celebración de los 90 años de ACA y preparándonos para la Asamblea Federal, compartimos las orientaciones que los distintos Papas nos han regalado a través de documentos, cartas y mensajes, a lo largo de este tiempo
Les proponemos entonces caminar, rumiar, testimoniar, rezar, celebrar y conocer también los distintos apostolados que se han hecho y se hacen en la Institución
Este lunes compartimos otro fragmento del Mensaje del Papa Francisco en ocasión del 30° aniversario del Foro Internacional de Acción Católica (FIAC), del 9 de noviembre de 2021.
Para leer y rumiar
«Pironio fue un hombre de raíces profundas, de memoria anclada en el dinamismo de la historia como un Kairos, tiempo fuerte de salvación, tiempo de trabajo, prueba, purificación y esperanza. Amó la Acción Católica y creyó en su vocación laical misionera. La Iglesia puede dar testimonio de que la Acción Católica abrió nuevas perspectivas en el campo de la responsabilidad del laico en la evangelización. Muchos evangelizados y formados por la Acción Católica pusieron verdad, profundidad y Evangelio en ámbitos civiles, muchas veces vedados a la fe. Los santos y beatos laicos de la Acción Católica son una riqueza para la Iglesia. Esos que fueron “los santos de la puerta de al lado” de tantas comunidades.»
Papa Francisco, Mensaje al FIAC en 30° aniversario, 9 de noviembre de 2021.
Para compartir en la vida de grupo
¡Que hermosas palabras sobre el Cardenal! Estas pueden verse también reflejada en la imagen de muchos sacerdotes que hemos conocido, a lo largo de la historia transcurrida lejana o cercana de nuestra Institución y en el mismo presente.
En este tiempo de espera en que debemos abrir el corazón, te proponemos:
- Compartir el nombre y la obra (en pocas palabras) de las personas que te mostraron a Jesús en la Acción Católica.
- Pensar cual podría ser tu forma de agradecimiento hacia ellas (quizás una misa si ya fallecieron, una visita si están viejitos o no, una llamada, una oración por el bien que nos brindaron).
Compartiendo el caminar… Y el testimoniar
Hoy Mario Juárez, miembro de Adultos de la diócesis de la Santísima Concepción de Tucumán nos cuenta aspectos de la vida del Padre José Ignacio Herrera, un sacerdote muy querido que contagiaba el amor por la Institución y solía hacer cantar a chicos y grandes: “la canción del aspirante, ágil pura y transparente…”
Día 17 de agosto de 1958: los vecinos de la ciudad de Concepción, en Tucumán, celebraban la llegada del primer sacerdote nacido en esta ciudad. Oficiaba aquí su primera misa. Un joven de 24 años, único varón de un matrimonio de 5 hijos. Era ya, “el padre” José Ignacio Herrera. Actualmente, cuenta con 87 años de edad (nacido el 26 de mayo de 1934).
A más de 63 años de su primera celebración eucarística -en la Iglesia de la ciudad territorialmente más pequeña, en la provincia más pequeña de la Argentina-, su presencia pública es reconocida con alborozo por todos cuantos le reconocen en algún acto que requiera de su asistencia. (…)
Fue el acontecimiento de la creación de la Diócesis de la Santísima Concepción, Tucumán –agosto 12 de 1963-, lo que le trajo finalmente a pastorear en sus tierras del sur provinciano. Luego de un corto tiempo, fue convocado para ser vicario del primer obispo, Mons. Juan Carlos Ferro. Y luego, vicario general durante 10 meses hasta el arribo del nuevo obispo, Mons. Jorge Meinvielle. (…)
Presencia transformadora
Jóvenes de vida desordenada, temor del vecindario, fueron convertidos en los más eficaces servidores de una iglesia. Corresponsables y animadores.
Eran de asistencia diaria a un oscuro bodegón, con sus extravíos. Un día, el cura reciente del pueblo, se presentó, con su sonrisa irradiando bondad, y les ofreció el espacio de la casa parroquial para que se reunieran… ¡Cambió sus vidas! (…)
La iglesia y casa parroquial, ahora llenas, fueron su nueva casa. Sus conciencias descubrieron otro camino. Sus corazones latían con el impulso de la fe… Fue el primer grupo de Acción Católica de ese lugar.
Un sembrador
Sembrador de semillas, en tierra fértil recién descubierta: Una constante en su vida de sacerdote, el querido por todos, padre Herrera.
Así como produjo la transformación en un pueblo sufriente por la falta de trabajo, por el cierre de ingenio azucarero (…) Así, fue llevando su mensaje de conversión por cada uno de los lugares por donde se tuvo la gracia de haberlo recibido.
Constructor y recuperador de iglesias y casas de caridad; gestionante irrechazable de apoyos para obras de bien y culturales; infaltable asesor y creador de instituciones; visitante rutinario como restaurador en ambientes distanciados de la fe; infalible impulsor hacia la gracia sacramental; consciente en la valorización de los fieles laicos como iguales en la misión(…)
Asesor de Acción Católica
Un día de comienzos de los ’70, la Acción Católica comenzó a crecer en la Diócesis. Ya era él el asesor de las ramas de hombres y jóvenes de la institución, en la jurisdicción del Obispado.
Florecimiento notable. La Acción Católica tomó cada vez mayor presencia en la comunidad, principalmente entre la juventud. Así fue que sus dirigentes eran invitados para alentar a jóvenes de cada lugar o como animadores de actos de piedad relevantes.
Se multiplicaron actividades de carácter comunitario que permitieron llevar el mensaje de fe a diferentes ambientes: semanas de juventud (con final de concentración y misa en estadios, y marcha procesional hacia el templo); Peregrinaciones con estaciones de meditación; talleres-retiro acelerados de formación dirigencial; encuentros diocesanos (algunos, con invitados) en lugares donde no estaba la institución; apoyos para la formación de grupos apostólicos ambientales (uno de ellos en la Universidad católica); organización de reuniones festivas para estudiantes en lugares abiertos; organización de reuniones culturales abiertas, con temas sociales; festivales competitivos de canciones navideñas… (…)
Una actividad prolijamente planificada cada año, donde la presencia del asesor –ya elevado en dignidad, al trato de ‘monseñor’-, José Ignacio Herrera, fue el mejor y más sensible aliento para los dirigentes y militantes de las instituciones y grupos de pastoral por él creados, atendidos, fortificados .
…
Pastor, creador, constructor, gestor, amigo, y hasta casi miembro de las familias que se acercaban a su obrar de fe (solicitado como padrino en bautismos, confirmaciones y matrimonios). No son pocos los que recuerdan haber superado momentos difíciles sociales de su vida en comunidad, gracias a su gestión personal. (…)
…
Hace ya tiempo, en un alejado espacio tucumano, jóvenes de vida extraviada fueron convertidos en fieles laicos reconocidos. Fue el padre Herrera quien supo orientarlos hacia los brazos del Salvador… Hoy, con sus 87 años de edad, conserva intacta esa fortaleza espiritual contagiosa, como aquella vez…: con la sola cercanía de su presencia y el llamado permanente de aliento y conversión. (…)
DE SU BIOGRAFÍA INSTITUCIONAL
Reseña extractada
- Nació en Concepción el 26 de mayo de l934.
- Ordenación sacerdotal: 8 agosto 1958 (primer sacerdote nacido en Concepción)
- Primera misa: 17 agosto 1958 iglesia Inmaculada Concepción (hoy Catedral)
- Vicario del primer obispo de la Diócesis de la Santísima Concepcion, Mons.Juan Carlos Ferro.
- Vicario general (marzo a diciembre 1980) hasta llegada nuevo obispo, Mons. Jorge Arturo Meinvielle.
- Párroco en 5 parroquias.
- Iniciador de 4 nuevas jurisdicciones parroquiales y 10 capillas.
- Encomendado por Mons. Ferro: gestor, coordinador general, secretario académico y consultor honorario en la creación del Centro Universitario Concepción (UNSTA). // Construcción del hogar de ancianos “Casa de Paz y Bien” y anexo comedor infantil “Ceferino Namuncurá”.
Gracias a la Diócesis de Concepción por tan hermoso e inspirador testimonio.
¡ Hasta el próximo lunes!