Encuentro de oración por el trabajo en ACA
Dirigentes de las centrales obreras, ex funcionarios, referentes de movimientos sociales participaron el martes 2 de mayo del encuentro de oración y reflexión por el Día del Trabajador, convocado por la Acción Católica Argentina, la Comisión Episcopal de Pastoral Social (Cepas) y la Comisión Nacional de Justicia y Paz (CNJP). Monseñor Jorge Lozano, presidente de la Cepas, pidió buscar “modelos alternativos de desarrollo que sean amigables con el ambiente, la casa común, y solidarios con los pobres, nuestros hermanos” y “pensar el trabajo frente a las nuevas tecnologías y los avances en la robótica, que cada día desplazan más puestos de trabajo”.
El mismo, que se desarrolló en el auditorio “Osvaldo González Prandi” de la sede nacional de ACA, contó con la presencia de Carlos Acuña, uno de los tres secretarios generales de la CGT; el ex ministro de Trabajo de la Nación, Enrique Rodríguez; Esteban “gringo” Castro, de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP); Natalia Robledo de CTA Autónoma; el Padre Nibaldo Leal (cura villero de la diócesis de San Martín), entre otros destacados dirigentes sindicales, de organizaciones sociales y de movimientos y asociaciones laicales.
Por ACA lo hicieron, Adrián Alvarez y el Padre Emmanuel Bonetta, responsable y asesor de la Comisión Nacional de Sectores, respectivamente; Soledad Taglianetti, secretaria del Consejo Nacional; y el padre el padre Jorge Villafañez, viceasesor general de ACA. Félix Testone y Mario Matanzo, ambos referentes sindicales para Cepas y CNJP; y varios referentes de las instituciones convocantes.
En su predicación, monseñor Lozano reafirmó que “el trabajo da identidad” y recordó las muchas veces que en los pueblos se conocía a las personas por su oficio y luego por su nombre. Destacó asimismo la tarea de la dirigencia sindical y de las organizaciones sociales que representan a otros trabajadores que “son tratados como sobrantes o descartables” y les pidió “crecer permanentemente en el servicio a los más desprotegidos”.
El obispo planteó, asimismo, dos retos en torno al trabajo: “Uno es el relativo a la búsqueda de modelos alternativos de desarrollo que sean amigables con el ambiente, la casa común, y solidarios con los pobres, nuestros hermanos. La voracidad consumista de una parte de la humanidad está poniendo en riesgo el Planeta. Algunos aspectos de este tema los abordaremos en la Semana Social en el mes de junio. El segundo reto es cómo pensar el trabajo frente a las nuevas tecnologías y los avances en la robótica, que cada día desplazan más puestos de trabajo”, e instó a todos a imaginar respuestas.
Por su parte, Acuña, tras calificar al encuentro como “muy enriquecedor”, valoró la “preocupación permanente” de la Iglesia por la cuestión del trabajo. En ese sentido, agregó que “la Iglesia desde siempre se ha preocupado por la familia y a partir de ella por el trabajo da cada persona. Cuando el jefe de familia tiene su trabajo, toda su familia está feliz, porque puede cumplir sus metas y sueños”.
Al concluir la ceremonia, dirigentes de ACA entregaron estampas de San José Obrero a todos los asistentes.
Mensaje de Monseñor Lozano
Queridos hermanos y hermanas, les traigo un saludo de parte de los otros obispos de la Comisión Episcopal de Pastoral Social. Hoy estamos iniciando nuestra Asamblea Plenaria.
El mundo del Trabajo, representado hoy por ustedes, dirigentes sindicales y de organizaciones sociales, es muy querido por la Iglesia. El Papa Francisco, en continuidad con el magisterio de sus predecesores y con su propia impronta, nos alienta a los obispos, sacerdotes y organizaciones eclesiales a acompañarles y estar cerca de ustedes.
Es que el papel de ustedes es muy importante. Representan a los trabajadores de diversas actividades y también a los más desfavorecidos de la sociedad consumista e individualista. Nos ayudan a liberarnos de la globalización de la indiferencia. Los gremios buscan mejorar las condiciones laborales y salariales de los trabajadores de su sector. Los movimientos sociales se organizan para representar a otros trabajadores que son tratados como sobrantes o descartables que no deben quedar afuera de la mesa de la vida.
Recuerden entonces que lo más importante para ustedes es cuidar mucho esta dimensión representativa de su lugar en la sociedad. Esto no lo digo desde un lugar angélico ni mirando desde arriba, sino compartiendo la misma fragilidad. Les pido por favor crecer permanentemente en el servicio a los más desprotegidos, a los que son tenidos y considerados como los últimos. Nada debe anteponerse a esta vocación para no desdibujarse ni en los medios ni en los fines. No debemos buscar beneficios personales, ni privilegios de ningún tipo, sino solamente ser sensibles a las necesidades de los pobres.
Quiero solicitarles considerar dos preocupaciones o desafíos acerca del trabajo. Uno es el relativo a la búsqueda de modelos alternativos de desarrollo que sean amigables con el ambiente, la casa común, y solidarios con los pobres, nuestros hermanos. La voracidad consumista de una parte de la humanidad está poniendo en riesgo el Planeta. Algunos aspectos de este tema los abordaremos en la Semana Social en el mes de junio. El segundo reto es cómo pensar el trabajo frente a las nuevas tecnologías y los avances en la robótica, que cada día desplazan más puestos de trabajo.
En San José encontramos ejemplo de buen vecino, trabajador, cariñoso con su familia y dedicado a la oración. A él le pido por todas las familias de la Patria. Que Dios los bendiga.
Jorge Eduardo Lozano
Arzobispo coadjutor de San Juan de Cuyo
y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social