25 de Mayo | Por una nueva revolución en paz por el sueño de ser libres

En un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo que diera a estas tierras sueño de Nación, queremos renovar nuestra esperanza comprometida en realizar aquel anhelo de libertad que aún clama ante nuevos desafíos.

Ante la realidad que vivimos, queremos ser libres de la exclusión y la inequidad que deja a tantos hermanos y hermanas nuestras sumidas en la pobreza y la indigencia. Queremos ser libres de una economía que no pone en el centro a la persona sino al mercado y las finanzas.

Queremos ser libres del crimen organizado que mete miedo en ciudades y barrios, ganando espacios y amedrentando a los ciudadanos frente a la inacción del Estado. Queremos ser libres de la droga, por eso reafirmamos “¡Ni un pibe ni una piba menos por la droga!” Queremos ser libres de la Trata de personas, “¡Basta de Trata!”. Libres, también, de la corrupción que transa y de los abusos de todo tipo que laceran la vida de tantos hermanos y hermanas nuestras.

Queremos ser libres de los enfrentamientos violentos y las grietas que demoran los consensos necesarios para salir de la crisis que atravesamos. Queremos ser libres de las trampas que genera la ideología del individualismo y del sálvese quien pueda, arrojándonos al peligro de la anomia.

Queremos ser libres, para que la experiencia de vacío que experimentan muchos adolescentes y jóvenes, que perciben el futuro sin esperanzas, encuentre caminos de sentido. Queremos ser libres para que nuestros abuelos no queden relegados a la supervivencia, para que nuestros hermanos y hermanos con discapacidad sean incluidos y atendidos y para que nuestra infancia no quede atrapada en el 60 % de pobreza.

Queremos ser libres de los escenarios que nos condenan a la mala explotación de los recursos y al mal uso de los bienes de la tierra que hipotecan nuestro futuro.

Queremos ser libres de cualquier forma de trabajo que no honre la dignidad del trabajador y le impida llevar el pan a la mesa de su hogar, acceder a su vivienda o al sistema de salud. Queremos ser libres de la ignorancia en que caen los pueblos que no se preocupan por la educación de las nuevas generaciones, y, por eso, proponemos un nuevo pacto educativo.

Queremos ser libres para debatir ideas y propuestas de quienes aspiran a representarnos porque nuestro voto vale y deseamos hacerlo valer en el ejercicio democrático.

Queremos ser libres de los intereses que se juegan cuando cada poder del Estado no cumple su rol orientado al bien común, empecinado en entorpecer al otro, así como cuando los intereses particulares o sectoriales se anteponen a la Amistad social.

Queremos ser libres de toda ideología que atente contra el valor supremo de la vida, que cancele al que piense diferente, que discrimine y no respete, que limite la libertad de conciencia o religiosa, que vulnere los derechos, especialmente de los más desprotegidos.

Queremos ser libres de toda acción que no favorezca la cultura del cuidado y del encuentro para hacer posible una patria más justa, más fraterna y más humana, donde ciudadanos e inmigrantes puedan sentirse cobijados. Queremos ser libres de todo aquello que impida o demore el desarrollo integral de cada ciudadano o ciudadana y de cada familia, que habita los cuatro puntos cardinales de nuestro suelo argentino.

También en esta fecha patria, queremos dar gracias por los logros que, como país hemos cosechado en estos 213 años y celebrar el trabajo honesto de tantos argentinos, la entrega generosa de quienes con esfuerzo contribuyen a crear estructuras de bien.

Celebrar la tarea fecunda de las y los profesionales, científicos, productores y empresarios, microemprendedores, que se ponen al servicio de lo humano, así como la fortaleza de los que no se dan por vencidos, la perseverancia amorosa de las familias que cobijan la vida, la vitalidad de los jóvenes que construyen con energía y confianza.

Queremos agradecer la fuerza de la fe y valores que los distintos credos aportan a la vida social y por la corriente de solidaridad que existe en las comunidades donde los desencuentros y las necesidades urgentes se superan con una mano extendida dispuesta siempre a ayudar

En este 25 de mayo, deseamos para nuestra patria una revolución en paz que rompa las cadenas de la indiferencia, para dar pasos de libertad que alienten la esperanza de nuestro pueblo.

Imploramos al buen Dios y a la Virgen de Luján nos acompañen y bendigan en este aniversario patrio, para afianzar el anhelo de libertad en el año que se cumplirán 40 años del restablecimiento de la democracia.

Acción Católica Argentina